martes, 25 de febrero de 2014

El Valencia, ¿un gran Club de Fútbol?

Para empezar, me gustaría diferenciar esta publicación de las demás, ya que voy a tratar un tema completamente personal. Ahora que el Valencia va bien deportivamente y parece que afición y equipo están juntos, creo que es el momento de transmitir algo que llevo dentro.

Tengo la suerte de haber podido vivir el Valencia como equipo desde dentro. Y lo llamo suerte no porque fuera una grata experiencia, sino porque ha sido una de las experiencias que más me han hecho madurar como persona hasta el momento. Lo cierto es que en Valencia he pasado grandes momentos con grandes personas, pero también he vivido momentos muy duros y de mucha presión, que desde luego, no le desearía a ningún niño de doce años. Hablo de un constante acoso y derribo por los niños de mi edad que opinaban que la actuación de Koeman, Bruins y mi padre no estaba siendo la adecuada. Muchas personas piensan que los niños son niños y no saben de lo que hablan. Y es cierto. Ahora con el tiempo me doy cuenta de muchas cosas. Me doy cuenta de que es verdad que los niños no entendían el significado real de sus palabras, pero que sin duda repetían lo que se decía en su casa. Ahora veo claramente el reflejo de la afición del Valencia en estas personas. Veo una afición que cuando todo va bien animan y cantan, pero cuando las cosas van mal, incluso a corto plazo, piden la cabeza del entrenador y del presidente. Y lo peor de todo, pienso que es una afición especialmente irrespetuosa por el trabajo de los demás.

Hace unos días leí unas declaraciones de Albelda en twitter donde decía que le gustaría ver a Koeman entrenando al Barcelona para que así la liga se igualara un poco. Me gusta mucho que haya hecho este comentario, ya que hace una perfecta demostración de su categoría como persona, que refleja perfectamente la de su equipo. De todas maneras, me gustaría recordarle que independientemente de si las decisiones tomadas por Koeman y su cuerpo técnico fueran las correctas o no, les permitieron ganar una Copa del Rey,  casualmente, el último título ganado por el Valencia. Igual, me gustaría destacar otras declaraciones donde el jugador aseguraba que se tomaba el fútbol muy enserio, "como si fuera un trabajo". De hecho, me gustaría aclararle que el fútbol es un trabajo al que muchas personas, como por ejemplo mi padre, se dedican. 

A partir de aquí, puedo entender que la entrada de Koeman al Valencia no fuera del agrado de algunos de los jugadores. Obviamente es algo que puede pasar. A todo el mundo nos puede ocurrir y de hecho nos pasa en nuestro día a día. Tenemos profesores y personas con las que no es de nuestro agrado trabajar, pero se acepta y se respeta, ya que esto forma parte de la vida y en este caso, de ser profesional. Lo que no se hace es no cumplir con tus obligaciones y mucho menos sabotear el trabajo de otras personas. Es una pena que haya gente que encuentre satisfacción en el fracaso de otras personas. De todas maneras, el fracaso es solo una gran oportunidad para empezar las cosas de nuevo con más inteligencia.